Se trata de una nueva caminata que se ha puesto de moda tras el confinamiento. Aunque está a más de diez kilómetros de Huesca aún es de su término municipal, y durante este confinamiento perimetral del otoño covid-19, era la mejor excursión posible sin riesgo a multas. Con el llenado del embalse de Montearagón, su cola se ha dividido en dos, dejando en el medio el tozal donde se encuentra el mirador bautizado por los runners de fatilandia como "El Púlpito de Montearagón" (si no le pones el acento sabe a mar y pimentón con patatas gallegas)
EL PULPITO DE MONTEARAGÓN |
Para llegar al Púlpito o Mirador de Montearagón (¡ojo que digo de Montearagón y no de Montepinar!) hay que llegar hasta el pueblo de Apiés. Luego hay que coger la pista que sale desde los mismos Lavaderos de Apiés en dirección norte, y lleva hasta el pueblo deshabitado de Lienas. Pero desde Apiés al Púlpito hay 6,5 kilometros (hora y media de caminata) por lo que aconsejo hacerlo desde el mismo pueblo, en caso contrario solo hacemos hambre pero no gastamos calorías. La pista es la que sale junto a los lavaderos, y llegar con el coche a estos es muy sencillo pues está en el pueblo pero sin abandonar la carretera, el edificio es este, pintado de azul.