EL CAMINO DEL NORTE Iº (IRUN-BILBAO). EN INVIERNO

El Camino del Norte es el Camino de Santiago que va por la costa cantábrica desde la frontera francesa en Irún hasta Santiago.


¿PERO EL CAMINO DEL NORTE PUEDE HACERSE EN INVIERNO?

Esa es la primera pregunta que nos hacemos todos cuando nos planteamos andar por el Camino del Norte en invierno. Si miras los comentarios de las guías, de las webs o de los blogs especializados sobre el tema, todos coinciden en no recomendar hacer este Camino en invierno ya que no hay albergues públicos y el recorrido es mas duro.

Pero SÍ QUE SE PUEDE HACER Y ES ESPECTACULAR

  •  Nosotros lo hemos hecho -aunque de momento solo el tramo vasco desde Irún a Bilbao, no había mas días de vacaciones- y a pesar de que si que es cierto que no hay albergues públicos abiertos (salvo el de Deba) los albergues privados sí que están abiertos, y aunque son algo más caros, en compensación están mejor equipados y todos tienen calefacción. También están cerrados bastantes bares y restaurantes en el recorrido, pero cuando llegamos al fin de cada etapa, que coincide normalmente con poblaciones, ya podemos encontrar restaurantes, muchos de ellos con menú del peregrino que sin grandes florituras a un precio razonable podemos reponer energías para el día siguiente. Y en Euskadi un menú es algo mas que un menú, una ración de comida para un vasco o vasca es algo mas que una ración.

  • Las dificultades que presenta este camino en invierno se compensan con lo espectacular del paisaje. Los prados vascos están mucho mas verdes en invierno que en verano, y como en la zona cantábrica las temperaturas son más suaves que en el interior, los bosques tienen todavía el ramaje color amarillo rojizo del otoño. Hay que recorrerlo para entenderme. Con algo de ropa de abrigo estoy convencido que hacerlo en invierno es más recomendable que en verano.

Quien camina en invierno por estos lugares o es aventurero -que creo que es nuestro caso- o intenta poner distancia de situaciones personales. Por ello en invierno por los caminos se conoce gente pintoresca a la que brevemente me referiré al final de este post.

No obstante conviene ilustrarse en las técnicas y trucos para hacer el Camino de Santiago. En un post aparte de este hago algunas reflexiones de nuestros ya diez años de experiencia en estas lides peregrinas.

Para el uso de esta pagina la divido en las siguientes tres partes:

  1. Datos generales de la ruta Irún-Bilbao
  2. Etapas
  3. Personajes del Camino

DATOS GENERALES DE LA RUTA IRUN-BILBAO

Inicio: Irún (en el puente internacional que lleva a la localidad francesa de Hendaya)

Fin: Bilbao

Kilómetros totales: 164 kmts

Etapas:  son 7 etapas (nosotros lo hicimos en seis etapas sin mucho esfuerzo añadido)

Distancia media por etapa: 23,5 Kmts/día si hacemos 7 etapas; 27,5 Kmts/día si hacemos 6 etapas

Desnivel positivo acumulado: 4.900 metros de ascenso (817 metros diarios si hacemos 6 etapas, 700 metros de ascenso diario si hacemos 7 etapas). 

Tracks de la ruta: como siempre los tracks los he cogido de wikilock. Los correspondientes al tramo desde Irún a Bilbao los podéis encontrar en este enlace Camino del Norte Iº: Irún-Bilbao

Dificultades destacables: el Camino del Norte, especialmente en su tramo vasco, es conocido por su dureza pues hay muchas subidas y bajadas. Además los albergues públicos como hemos dicho solo abren en verano, esto nos encarece el viaje y nos obliga a replantearnos inicios y finales de etapas en función de los albergues u hostales abiertos que tienen precio peregrino.

Algunos consideran que ir de albergues es cutre y por eso prefieren hacerlo usando hoteles de varias estrellas. Allá ellos. Se pierden lo mejor del Camino, la socialización, que realmente se genera en los albergues donde todos y todas llegamos cansados y con las mismas necesidades que obligan a compartir información. El mundo se puede conocer viajando o compartiendo conversación con gente que lo conoce  mientras caminas, y a esa gente se la conoce en los albergues.

En invierno conviene llevar reservado todo lo que podamos y tener siempre una alternativa por si se nos atasca el Camino y tenemos que quedarnos en alguna población intermedia. Como este tramo tiene el sambenito de que no puede hacerse en invierno, no encontraremos muchos peregrinos que nos hagan compañía, por ello habrá bastantes tramos del Camino que estaremos solos, aunque la gente vasca es muy deportista y siempre encontraremos a alguien en bici, corriendo o simplemente andando por los caminos, por si necesitamos ayuda o información. Conviene llevar descargados los tracks del Camino que podemos encontrar en wikilock y a ser posible ir mirando de cuando en cuando el movil para comprobar que no hemos perdido la ruta. Al final de esta entrada de blog amplío información sobre tracks y apps para usarlos.

Aspectos positivos: este tramo del Camino es sin lugar a dudas el más espectacular en cuanto a paisaje, en cualquier estación del año, pero el invierno es el momento del año en el que esa espectacularidad es mayor. 


E T A P A S

1ª ETAPA. DESDE IRUN HASTA SAN SEBASTIAN POR EL MONTE JAIZKIBEL

Distancia: 27 kilómetros

Desnivel positivo acumulado: 943 mts.

Tiempo estimado sin paradas: 6 horas 45 minutos

Dificultad: dificultad media (por la distancia y el ascenso acumulado), pero se deja hacer.

¿Dónde dormir? en invierno los dos albergues municipales de la ciudad de San Sebastián, el de la playa Ondarreta y el del Monte Ulía, están cerrados (si vais en época distinta al invierno el de Ondarreta está muy bien). Por ello en invierno hay que echar mano de hostales o albergues privados (hostels urbanos). A nosotros nos recomendaron el Hostel a room in the city es algo mas caro que otros privados pero la relación calidad precio y la ubicación lo hace incomparable con otros.




A destacar: Esta etapa se divide en dos partes. La primera es desde Irún hasta Pasajes (Pasaia en vasco), y la segunda desde Pasajes a San Sebastián (Donosti en vasco). Al llegar a Pasajes hay que cruzar la ria en barca (1´5 €/persona y frecuencia rápida, cuando hay gente sale). El Euskotren que une San Sebastián con Irún sale cada media hora, y para en Pasajes. De tal forma que si en Pasajes nos cansamos podemos ir a San Sebastián o volver a Irún sin mucho problema. Por otra parte esta etapa se puede hacer por una ruta fácil y otra algo más cansada pero mas recomendable por sus paisajes, que sube a lo alto del monte Jaizkibel.

Esta ruta esta perfectamente señalizada con flechas amarillas.

  • Inicio en Irún.- La tradición dice que hay que empezar en el lado español del puente internacional que une Irún y Hendaya (Francia). Incluso hay gente que comienza en el centro de Hendaya alargando unos tres kilómetros mas (el Euskotren que viene de San Sebastian llega hasta Hendaya).
  • De Irún al Monasterio de la Virgen de Guadalupe.-  Se sube por una pista bien marcada. No es difícil la subida pero exige su esfuerzo. La iglesia es del siglo XVI y tiene un mirador que merece mucho la pena pues desde allí puede verse la Bahía de Txingudi, o lo que es lo mismo la ria del rio Bidasoa que a un lado están Irún y Hondarribia (Fuenterrabia) y en el otro Hendaya. 

el paisaje no tiene igual, al fondo Hendaya, e incluso puede verse San Juan de Luz, ambos en Francia.



En toda esta etapa veremos mucho bambú silvestre, algunas cañas alcanzan los cinco metros


esto será el anticipo del paisaje que nos acompañara una semana, prados muy verdes, bosques de pinos, eucaliptos y hayas, caseríos al estilo vasco y ganado pastando

  • Desde el Monasterio de la Virgen de Guadalupe a lo alto del monte Jaizkibel.-  Iremos todo el rato viendo el mar a la derecha y a la espalda. Por la derecha discurre la senda de la costa y que nosotros hicimos este verano y que podéis ver en este enlace La Senda de las Areniscas y las Paramoudras del Monte Jaizkibel, senda que es mucho mas recomendable que la que estamos siguiendo en el Camino de Santiago,  pero por su exigencia es mejor hacerla en verano.


Alto de Jaizkibel. Restos de la fortificación que allí había.

  • Del alto del Jaizkibel hasta Pasaia (Pasajes)
La bajada es sencilla. Iremos todo el rato por un bosque que si no se han caído las hojas de los árboles nos permitirá disfrutar de una ruta que no desmerece de otros bosques del Pirineo. 

El descenso desde lo alto del Jaizkibel lo haremos por bosque









En Pasajes habrá que hacer parada para comer. Hay varios restaurantes en ambos lados de la ria, en varios de ellos hay menú. Nosotros comimos después de pasar la barca.

  • El paso en barca de la ria de Pasaia (uno de los iconos del Camino).-  Nosotros decidimos comer al otro lado de la ria por miedo a comer antes y llevar el estomago lleno que podría dar lugar a marearnos en la barca. Pero no hubo problema, no hay tiempo para mareos. La cámara de fotos tiene que ir a mano. Una amiga que se crió en Bilbao y que es una gran montañera, me comentó que a estas barcas que pasan las rias vascas se les conoce como "los gasolinos". Vale 1,5 € por persona, tarda  cinco minutos en pasar al otro lado, y es una experiencia para recordar.




  • Desde Pasajes a Donosti por el monte Ulía.- Desde Pasaia (Pasajes) hasta Donosti (San Sebastián) se puede ir por dos rutas, ambas perfectamente señalizadas. La fácil es por zona urbana que es corta pero mas fea. La otra, que es la que nosotros hicimos, va por el monte Ulía, pasa por el faro de Pasajes. Esta última va toda por bosque. No es ni difícil ni cansada. Pero debemos recordar que en invierno a las 18,00 horas ya hay que usar linternas, por lo que no podemos alargar mucho la sobremesa en el restaurante y llevar las linternas frontales a mano.


Llegando a San Sebastian. Junto a la playa podemos ver el Kursal.


En torno al estadio de Anoeta se puede aparcar el coche.Nosotros fuimos a recoger lo que habíamos dejado el dia anterior. Y aprovechamos para ver una carrera en el velodromo de Anoeta




2ª ETAPA. SAN SEBASTIAN A ZARAUTZ

Distancia: 23,13 kilómetros

Desnivel positivo acumulado: 626 mts.

Tiempo estimado sin paradas: 6 horas 2 minutos

Dificultad: dificultad baja 

¿Dónde dormir?: el albergue municipal en invierno está cerrado pero hay varios privados, yo aconsejo el Hostel Blai Blai de Zarautz que no es caro y es de los mejores en los que he estado.


Esta será una etapa muy bonita, que discurre pegada a la costa y sin muchos desniveles. Es tranquila y nos permitirá recuperarnos de la etapa del día anterior. Los primeros diez o doce kilómetros se hace por una pista asfaltada. Al Camino del Norte se le  echa en cara un exceso de asfalto, pero cuando te toca andar en días de lluvia entiendes el porqué de esto, pues en las zonas no asfaltadas la lluvia se acumula y es mas difícil el andar.

En esta primera fase hay pocos bares para poder hacer una parada y tomar un café o una cerveza. No obstante a unos doce kilómetros desde el inicio de la marcha junto a un caserío que están transformando en albergue, encontrareis un pequeño entoldado con un par de mesas y sillas donde podréis tomar un café y comer una madalenas caseras de la Komuna "Las Doce Tribus" merece la pena parar y charlar un rato con ellos, son una mezcla de amish y hipys......buena gente y buenos cocineros.

Igual que la etapa anterior esta tiene dos partes. La primera más larga es hasta Orio donde podremos admirar su ria. Aquí no hay barca (gasolino) para cruzar al otro lado, hay que hacerlo por un puente. Pero os aconsejo que aquí paréis a comer de mesa y mantel. Hay varios restaurantes con menú, pero el menú peregrino lo podéis comer en restaurante Zaharren Babeslekua que está en la plaza en los bajos del edificio del Ayuntamiento junto a la ria. No os terminareis el menú, y cuando hablamos del menú peregrino se conoce como tal a un menú alimenticio sin grandes florituras culinarias, pero muy bien cocinado, a un precio económico y que os alimentará para poder seguir gastando calorías en el Camino.

La segunda parte discurre también por la costa para lo que tendremos que atravesar la ria de Orio por su puente y luego seguir las flechas. En hora y media llegareis a Zarautz .

Para cenar podéis ir de pinchos o de menú, aunque en invierno no hay muchos. En todo caso es imperdonable no irse a tomar una caña al restaurante de Arguiñano que está en el mismo paseo marítimo.


3ª ETAPA. ZARAUTZ-DEBA

Distancia: 27,40 kilómetros

Desnivel positivo acumulado: 792 mts.

Tiempo estimado sin paradas: 7 horas 3 minutos

Dificultad: dificultad media (por la distancia y alguna que otra cuesta)

¿Dónde dormir? El Ayuntamiento de Deba ha tenido la valentía de mantener abierto el albergue municipal. Cuesta 8,0 €, y las instalaciones están bien. Es parte de la antigua estación del tren. Aunque es del Ayuntamiento la gestión la lleva una asociación de amigos del Camino de Santiago de Deba. Si llegáis y está cerrado hay que pasar por la Policía Local para darte de alta y te facilitan el código de entrada. 


Esta ruta exige dos paradas, por lo que al final se transforma en una etapa de tres tramos. 

  • De Zarautz a Getaria.- Recientemente han remodelado el tramo carretero que va desde Zarautz a Getaria para habilitar un paseo peatonal que convierte en obligado ir hasta Getaria que está a poco mas de cinco kilómetros. Getaria es un pueblo marino que tiene un casco antiguo interesante, y sobre todo su iglesia parroquial con sus vidrieras. La panadería que hay junto a  la parroquia ofrece unos desayunos con tostadas panes de semillas que son un pecado.
Paseo peatonal desde Zarautz a Getaria
  • De Getaria a Zumaia.-  Son 7 kilómetros de distancia, y se recorren sin enterarnos gracias al paisaje. Si vais bien de tiempo al llegar al pueblo de Elorriaga podéis bajar a contemplar los Flysch que son las formaciones rocosas en capas verticales que se adentran en el mar. Os retrasara una hora pero merece la pena. Incluso en lugar de volver a Elorriaga para continuar por el trazado oficial del Camino de Santiago podeis continuar por el sendero de la costa que en pocos kilómetros volveréis a conectar con el de Santiago.
Getaria

  • De Zumaia a Deba.- Aquí os aconsejo para a comer en el pueblo de Iiziar, en el restaurante junto a la carretera tenéis un menú  muy completo a buen precio. No obstante en Deba también tenéis restaurantes.
Los Flyshc de Zumaia


Camino a Deba

4ª ETAPA. DEBA A MARKINA (DEJAMOS LA COSTA). MONASTERIO DE ZENARRUZA

Esta es tal vez la etapa mas dura del Camino del Norte. Se trata de un recorrido que sube y baja y en nuestro caso la etapa fue aún mas larga porque al no haber alojamiento en Markina continuamos 6 kilómetros más hasta el Monasterio de Zenarruza.

Distancia: 35,10 kilómetros (unos 27 kilómetros si nos quedamos a dormir en Markina)

Desnivel positivo acumulado: 1226 mts. (entorno a 1.000 metros si nos quedamos en Markina)

Tiempo estimado sin paradas: 8 horas 20 minutos (7 horas si nos quedamos en Markina)

Dificultad: dificultad media alta (por la distancia y alguna que otra cuesta)

¿Dónde dormir? En Markina habitualmente hay albergues y hostales, pero en invierno no hay albergues abiertos, ni público ni privado, y la oferta de hostales disminuye y es algo cara. Pero la opción de continuar hasta el Monasterio de Zenarruza es muy recomendable, allí hay 21 literas para los peregrinos, y los monjes cistercienses te facilitan la cena y el desayuno.

Otras cuestiones a tener en cuenta.- Esta es una etapa dura y larga, por ello hay que madrugar. Tenemos la suerte de que todo el año el bar que hay frente al albergue municipal de Deba abre a las 6 de la mañana y las tostadas están muy apetecibles. Pero no perdáis mucho tiempo en el almuerzo ni en el camino. Conviene empezar la marcha con las luces de las linternas frontales. A unos 5 kilómetros en la ermita del Calvario que está junto al camino hay un bar, aunque abren a las 10 de la mañana y por lo tanto si queremos llegar a Zenarruza no estará abierto cuando paséis por ahí. No obstante a 8,5 kilómetros de Deba pasaremos por el pueblo de Olatz que tiene una cafetería con una tortilla de patata que no desmerece de la de Betanzos. A partir de ahí ya no encontraremos nada, por lo que hay que llevar agua y un poco de comida. A 26 kilómetros de Deba llegaremos a Markina donde hay bastantes restaurantes con menú nosotros comimos muy bien en el restaurante Niko Jatetxe que esta en la plaza junto al trayecto del Camino.

Comenzando la marcha a la luz de las linternas frontales


Del paisaje de esta etapa destacaría la cantidad de pequeños valles llenos de prados verdes, con bosques de pinos, hayas, castaños, pero muy abundante "eucaliptos". 

 

EL MONASTERIO CISTERCIENSE DE ZENARRUZA

Los siete kilómetros que tenemos hasta el Monasterio son cuesta arriba aunque no se hace duro. Si lo hacéis en invierno llevar las linternas frontales a mano pues recordar que anochece a las 17,55 horas. Pero hospedarse en esta reliquia románica es más que aconsejabl,e es esencial. Se trata de un enclave religioso que arranca de la Edad Media. Fue uno de los hospitales de peregrinos mas importantes de todo el Camino de Santiago medieval. Ha sufrido diversas remodelaciones pero la iglesia y su claustro actuales datan del siglo XV sobre el edificio medieval. 

Para los peregrinos cuenta con 21 literas en dos habitaciones. Está en buenas condiciones. Tiene duchas calientes incluso en invierno. Y aunque no tiene calefacción hay una estufa que es mas que suficiente. Pero lo mejor de todo es asistir al acto religioso de las vísperas que se hace a las 19 horas. Es canto gregoriano que en su mayor parte lo es en euskera y latín. Ello nos permitirá admirar el interior de la iglesia y del claústo. El Monasterio está aislado en el campo por lo que el silencio se respira más. La asistencia a las vísperas lógicamente es voluntaria pero si no eres religioso solo por tratarse de un acto con gran contenido histórico y cultural, con casi mil años de antigüedad, es imperdonable perdérselo.

Después de las vísperas los monjes os llevarán a la habitación del albergue cena suficiente y bien cocinada, aunque un solo plato, el mismo que ellos comen, también os llevarán para el desayuno. 



Se mantienen con donativos y con la venta de productos del campo que recolectan. La cerveza que fabrican y que venden en la pequeña tienda que hay junto al Monasterio podéis comprar cerveza.


5ª ETAPA. DE MARKINA A GUERNIKA (EN NUESTRO CASO DEL MONASTERIO DE ZENARRUZA AL ALBERGUE/CASERIO DE POZUETA)


Distancia:27 kilómetros (si salimos de Markina y nos quedamos en Guernika son también 27 kmts)

Desnivel positivo acumulado: 617 metros

Tiempo estimado sin paradas: 6 horas 15 minutos 

Dificultad: dificultad media baja 

A tener en cuenta: Si no habéis estado nunca en Guernika casi es un pecado no ir a ver el museo o el conocido árbol de Guernika. Nosotros ya habíamos estado y lo que más nos preocupaba era echar algo al estomago y no llegar tarde a Pozueta porque había previsión de lluvia. No nos quedamos a dormir en Guernika a pesar de ser fin de la etapa oficial por no haber alojamiento libre, pues era la semana del macropuente de diciembre. También queríamos convertir las tres etapas finales hasta Bilbao en dos etapas algo mas largas. En Guernika sí que aconsejo parar a comer, hay buena oferta de menús al estilo vaso, es decir con platos llenos a rebosar y bien cocinados.





EL  CASERIO/ALBERGUE DE POZUELA. EL TIPICO CASERIO VASCO (BASERRI)

Edificaciones agrícolas aisladas que sirven tanto como vivienda como explotación agropecuaria tenemos en todas partes. Pero lo que diferencia al caserío vasco (baserri en euskera) es que se trata de un solo edificio a dos aguas, con cubierta exterior de teja romana roja. Pueden llegar a tener hasta 15 metros de altura y 1.000 metros edificados. En el mismo edificio se vive, se guarda el ganado y los aperos agrícolas. Aunque hoy en día ya casi no se ve, nosotros en esta etapa vimos varios caseríos con un uso como antaño, los animales en la planta baja y la vivienda en la primera planta, dejando la superior como pajar. Con unos veranos calurosos como en Huesca lo de tener el ganado debajo de la ventana no sería muy recomendable, pero en esta zona y más en la zona semimontañosa el clima es mas benigno en verano. En Euskadi según fuentes del Gobierno Vasco hay censados mas de 20.000 caseríos vascos del tipo baserri.

El Caserío/Albergue de Pozueta nos lo habían recomendado y acertamos. Para los que no quieren parar en Guernika este albergue está muy bien situado. Está en los bajos del Caserío donde vive la familia que lo regenta y las instalaciones están muy bien. Aunque no hay restaurantes en la zona, la familia que lo regenta prepara cena y desayuno a precio peregrino, y como siempre al estilo vasco, es decir bien cocinado y mucha cantidad. Pero además nos permitió convivir, aunque ligeramente, con una autentica familia vasca, ¡y oye que son como tu y como yo, no llevan la metralleta al cinto!

CASERIO/ALBERGUE DE POZUETA. UN ACIERTO SEGURO

Más información del Caserío /Albergue de Pozueta pinchando aqui


6ª ETAPA. GUERNIKA-BILBAO (EN NUESTRO CASO POZUETA-BILBAO)

Realmente la etapa oficial empieza en Guernika y termina en el pueblo de Lezama. Pero al día siguiente la etapa oficial es muy corta, solo de 11 kilómetros. De allí que lo que hemos hecho nosotros de alargar dos etapas durmiendo en Zenarruza y en Pozueta creo que es un acierto, así en lugar de siete etapas hacemos seis, y nos queda un íia entero para visitar Bilbao.

Distancia:24,7 kilómetros (desde Pozueta)

Desnivel positivo acumulado: 696 metros

Tiempo estimado sin paradas: 6 horas 7 minutos 

Dificultad: dificultad media 

¿Donde dormir?: en Bilbao ya tenemos una oferta hostelera importante, pero como queremos mantener el estilo peregrino, nosotros elegimos un albergue privado, el "All Iron Hostel Bilbao" que está muy bien, junto a la iglesia de la Virgen de Begoña, por tanto casi en el casco viejo.


Aquí lo dejamos por este año, pero continuará.



PERSONAJES DEL CAMINO

En todos los tramos del Camino que hemos hecho hasta ahora -y que ya empiezan a ser unos cuantos- siempre nos hemos topado con personajes curiosos. Como este blog no solo tiene la intención de ser una guía de viaje sino también un libro del viaje, he creído conveniente retratar a algunos de estos personajes. Soy consciente que un exceso de texto espanta a los lectores. Pero hasta aquí solo habremos llegado leyendo yo que lo escribo y un primo mio algo miope. Y lo que la gente no sabe que si llegas hasta aquí leyendo y descubres que la palabra mágica de este viaje ha sido "Zenarruza", cuando coincidamos en el Camino o en alguna otra ruta senderista, si me repites esa palabra vasca tendrás una cerveza bien fría pagada.

 

PENELOPE LA DEL PESCADOR

Realmente no nos dijo su nombre. Me recordó a la famosa Penelope de la canción de Serrat. Esa señora que algo pasada de la cabeza esperaba siempre la llegada del tren para ver si bajaba su amor -que por cierto parece que está inspirada en una señora de Jaca-. 

 

Después de soportar un chaparrón de importancia en la bajada desde el monte Jaizkibel, cogimos "el gasolino" es decir esa pequeña barca a motor que por el módico precio de 1,5 € te pasa en un abrir y cerrar de ojos al otro lado de la ria de Pasaia (Pasajes en Castellano, de hecho se cruza desde Pasajes de San Juan hasta Pasajes de San Pedro). Ibamos dentro de la barca con las mochilas puestas a la espalda y con la capa de lluvia  porque llovía, aunque ya menos. Esa barquichuela es uno de los iconos de los frikis que estamos enganchados a esto del Camino.  Iba yo como siempre esclavizado de mi cámara de fotos, bueno del móvil. La experiencia fue inolvidable. En un bandanzo de la barca por una ola fuerte casi me caígo al agua con mochila y cámara de fotos. Eso me hizo pensar lo peligroso que es viajar en estas pequeñas embarcaciones con la mochila puesta y cubiertos de la capa de lluvia. Una caída al agua conllevaría resultados fatales, no hay posibilidad  de nadar.

Al bajar de la barca me dijo el barquero (suena a una canción tradicional) me dijo  que un poco más a la izquierda había un bar que daban platos combinados. Nada más salir de la barquichuela hacia allí íbamos a iniciar nuestros pasos, pero una duda mía de si hacer o no otra foto a la ria detuvo nuestra marcha. Y al vernos como si del un resorte  de un muelle se tratara, una señora que nos miraba y que estaba sentada en el bordillo del jardín junto a la estatua del pescador de Pasaia se levantó y con un decidido pero a la vez vacilante paso se dirigió a nosotros.

Nos dijo algo. Y como ya llevamos muchos caminos andados pensabámos que era como en otras ocasiones, alguien de algún albergue privado que espera en el Camino la llegada de peregrinos para darles una tarjeta del albergue que promocionan. Yo de idiomas ando justo, por eso al no entenderla pensaba que nos hablaba en alemán o algo por el estilo. Le dije

    - ¡señora ya perdonará no la entendemos somos españoles!

Y entonces balbuceando un castellano de taberna nos dijo que también ella era española, de Pasaia pero española. Ya me vi yo en un rifirafe de españolidad versus independentismo, y algo mojado, con frío y hambre, a mi si ya esos debates me la traen al pairo en esta ocasión más. La mujer sacó de su bolsillo un iphone gris, y con voz balbuceante que unido al olor de vino chacolí que sus aspersores lanzaban hacia mi zona respiratoria entendí, entendimos, que la señora iba ebria, y eso que eran solo las tres de la tarde. Estaba empeñada en que yo le hiciera con su móvil una foto junto a la estatua del pescador que hay en en paseo marítimo. Quise ser educado y hice el gesto para coger su teléfono, hacer una foto y marchar pitando hacia el bar de los platos combinados para quitarme el frío, la humedad, el hambre y el cansancio acumulado. Pero no, la señora me dijo que esperara que tenía que regular bien su cámara. Algo me decía pero no era capaz de hacerse entender. Después de unos minutos esperando a que la señora configurara su cámara, le hice saber a la señora que tenía prisa. Al final la dejamos estar. Algo nos decía cuando marchábamos, y por el tono se dió por ofendida con el desaire.

Nos dio mucha pena.Se le veía una señora con posibles y con cultura. Iba vestida en plan pijo trasnochado, pero con la elegancia propia de la élite de hace unas décadas. Gorro de lana con franjas horizontales de colores verde, azul y rosa con una bola en la parte superior. Bufanda al cuello con el mismo dibujo que el gorro, atada con nudo pijo mas propio de la calle Serrano que del puerto de Pasaia. Vestía anorak que no se veía comprada en el Primak. En fin se veía que el alcohol era su debilidad, y que tenía perras para financiarlo. Un cóctel peligroso para el hígado.

Pena nos dio. Hubiera sido todo un honor charrar con esa señora en situación normal. Esa costumbre del norte que consiste en salir a chiquitear por los bares, tomando pinchos, es peligrosa para hígados cansados. Es cierto que con cada chacolí o rioja tinto, comen un pincho. Pero en las últimas décadas los pinchos han adelgazado mientras que los vasos de chiquitos han dado paso a copas grandes de vino. Y al que le engancha le engancha. El alcohol no tiene ojos. No respeta a camioneros, ni a señoras de buena cuna, ni curas reverenciados, ni pijos trasnochados, ni podemitas organizados. El alcohol no tiene alma, te atrae con juergas divertidas, y cuando estas descuidado te tira al suelo y te arrastra hasta el borde del precipicio.

Después de comer, calentarnos, cambiarnos la ropa mojada y descansar lo posible arrancamos con los mochilones por el bosque del faro de Pasaia, y mientras caía un chaparrón a los que ya estamos acostumbrados surgió la señora como tema de conversación. 

Ojala la Penelope del pescador de Pasaia un día encuentre a quien espera, o por lo menos encuentre peregrinos con poca mochila y sin frío que tengan paciencia para hacerle una foto junto al pescador con su iphone gris. Ojala que su higado aguante mas que sus perras y sus ganas de chiquitear.



EL FRIKI DE LOS SEIS IDIOMAS

La fauna que recorremos los Caminos de Santiago es muy diversa. Ultimamente abundan los coreanos. También son frecuentes los montañeros frustrados, los turistas deportivos,  los caminantes por razones religiosas, los que sin ser religiosos lo hacen por haber cumplido alguna promesa, que también los hay. Pero el Camino es caldo de cultivo para el frikismo -esperemos, confiemos, que yo no esté entre esa tribu, pero nunca podemos decir que de este agua no beberé ni que este cura no es mi padre-. También hay gente que lo hace por una finalidad terapéuticahe conocido gente que intentaba alejarse de las drogas, o de una depresión por una ruptura amorosa. Hace poco la parienta de un siquiatra me decía que los siquiatras desaconsejan usar el Camino de Santiago como medicina para problemas sicológicos. Le aconsejé a la buena señora que le recomendara  a su costilla hacer el Camino de Santiago, pues personalmente he visto a bastantes que fueron buscando salud mental, y lo consiguieron -aunque no todos- , pero lo que nunca he visto es a ningún siquiatra con mochila y barro en los zapatos, será que a la psiquiatría le falta muchas horas de laboratorio.

mas o menos era parecido, pero con pantalones de pana gruesa rosas, camisa de franela de leñador, bolsa con asas tipo mochila, y un ipad full on the rock para sus videoreunioes frikis de estirados con ego sobrevalorado


Los frikis que yo no había visto manchando sus zapatillas por estos barros, son los de estilo hackers. Sabía que también rondaban estos caminos. Esta vez me tope con un espécimen autentico.  Su estética era como si vieras a un híbrido de Bod Dylan y Jhon Lenon, con un gorro de lana pegado a la cabeza. No se quitaba el gorro ni para dormir. Supongo que en la ducha se lo quitaría, pero presumía que la ropa que llevaba era antiolores, y que no necesitaba llevar mucha ropa de recambio. Era ropa de los años setenta. Camisa de franela como los leñadores americanos o los montañeros que podías ver en los setenta durmiendo en los refugios de montaña del Pirineo. Se abrigaba con un jersey azul claro de lana con punto apretado. Complementaba su interior con camiseta blanca de tirantes como las que llevan los señores mayores que están ingresados en las residencias de ancianos. Y lo más llamativo era su pantalón de pana gruesa, pero que aún buscando estética haster setentera para demostrar su modernidad los pantalones eran rosa, y no se le veía muy del Barrio de Chueca.  Iba provisto de una mochila pequeña, que era tipo bolsa con asas de mochila, de esas que regalaban antes los bancos cuando hacías un ingreso. Precisamente uno de los comentarios despectivos que tuvimos que sufrir de este hister era que nosotros llevábamos unos mochilones "excesivos". Claro, luego ya supimos que no necesitaba mas mochila, pues no llevaba ni ropa de recambio ni saco de dormir. Dormía tapándose con las mantas o edredones de los albergues, y allí donde no había dormía vestido con el anorak puesto. Anorak que tampoco era gran cosa. 

Solo coincidimos tres etapas con el friki. Era distante y miraba por encima del hombro a todo aquel que no consideraba estar a su altura. Vamos, que miraba por encima del hombro a todo el mundo. En la cena comunitaria que hicimos en el albergue del Monasterio de Zenarruza estuvo algo mas hablador, haciendo alguna que otra broma que no hacían mucha gracia. En la conversación mantenida entre cucharada de macarrones con tomate y macarrones de tomate (era plato unico) nos contó que había nacido en Barcelona, por eso hablaba el castellano sin acento. Que a los seis años su familia se fue a vivir a Suiza donde aprendió los tres idiomas que se hablan en el país helvético. Que luego aprendió inglés en un internado en Inglaterra y también portugués. Lo curioso es que no sabía hablar catalán aunque lo entendía. Que trabajaba como traductor online para empresas españolas. Pero a los hispanos nos trataba con un tono de superioridad que no lo usaba con el irlandes y el aleman que nos acompañaron en el festín de macarrones cistercienses.

El friki-hister-hacker por su menor carga a la espalda llegaba antes a los pueblos que hay por el camino y a los finales de etapa. Pero no estaba muy dispuesto a ayudar facilitando información. En varias ocasiones al llegar nosotros a algún pueblo donde google nos decía que había restaurantes, nos encontrabamos al friki de los seis idiomas. Cuando nosotros llegabamos el marchaba bien comido, pero si le preguntabas por algun restaurante o no te contestaba o te decía algo que no venía a cuento, como quien se encuentra en la plaza del pueblo con sus parientes pobres y se avergüenza de ello. Incluso cuando aparecimos en el Monasterio de Zenarruza con nuestras linternas frontales, él ya había llegado hace horas y estaba sentado en una silla junto al claustro del monasterio en una videoconferencia con sus amigos que pudimos ver en la pantalla que tambien eran frikis hister con gorro de lana clavado a la cabeza. No había carteles señalizadores. No encontrabamos donde estaba el portero de los monjes cisterciences. Preguntamos al hister y ni siquiera se dignó en dirigirnos la mirada, y vernos nos vió perfectamente.

A mi los frikis potsmodernos amantes de las criptomonedas como que no. Prefiero los frikis clásicos, aquellos y aquellas que les encanta andar en invierno bajo la lluvia con su capa impermeable. Aquellos y aquellas que se ponen a andar por intentar alejarse de sus problemas.  Aquellos y aquellas que les encanta irse a cenar con gente que acaban de conocer y que hablan como si se conocieran toda la vida. 

Pero esos frikis digitales despilfarran en idiomas. Consigue mas comunicación los frikis clásicos que sin tanto idioma quieren hablar con sus iguales, que en el fondo son todos y todas

 

 

 

LOS MONJES CISTERCIENSES

 DEL MONASTERIO DE ZENARRUZA

 

La religiosidad va por barrios, y en el mio los pasos de Semana Santa no cruzaban el puente del Isuela. Pero asistir a un acto hecho con religiosidad (lo cual es algo mas transcendente que un acto religioso) con un rito que se mantiene desde hace 10 siglos. Escuchar a cuatro monjes del Cister cantar gregoriano en euskera, en una iglesia que tiene ya sus siglos y que muchos norteamericanos quisieran ver en su tierra. Hacerlo junto a varios peregrinos (casi los mismos que monjes) con algo de humedad y frio en el cuerpo... pues eso..... los pelos como escarpias.

Además destacaría que uno  de los monjes, el mas viejo, tenía alzheimer, de lo que nos enteramos después. Hacía gestos raros indicandonos algo a la feligresía que no entendiamos, pero el "gachó" cantaba gregoriano como los angeles -aunque no conozco angel alguno pero me imagino que si existieran cantarian como el monje cisteciense con alzheimer de Mozarruza-

Mientras les escuchas cantar en euskera piensas en la vida tan aburrida que deben llevar encerrados en el Monasterio... o no.... 

 

 

EL IRLANDÉS ERRANTE


Era muy colorado de cara, como casi todos los irlandeses e irlandesas. El pelo con canas de experto en la vida. Debió ser rubio, rubio celta. Y como muchos de sus compatriotas, era absolutamente agradable, abierto y dispuesto a compartir lo que llevaba en su mochila que era poco, aunque eso de estar enganchado al chocolate me permitía sentir empatía.

Nos lo encontramos en el Monasterio de Zanarruza. No pudimos hablar mucho. Nosotros cada día llevamos peor el inglés y él hablaba poco español, unido al hecho de que el friki de los seis idiomas quería intermediar como traductor, lo que hacía que la comunicación no fuera tan fácil como en otras ocasiones, que al final en un spaninglis nos llegamos a entender. 

Pero pudimos conocer cosas de él. Llevaba seis meses en el Camino. No es el primero o primera que nos encontramos. Había salido andando de Dublín y después  de llegar a Santiago decidió regresar andando a casa. Aún estará por las tierras francesas donde pasará la Navidad. Al parecer sí... era religioso como buen irlandés que se precie.

Estos errantes del Camino son mas frecuentes de lo que creemos. Son gente que ya llevan los pies y la cabeza curtidos para andar muchas jornadas. Que miran mucho el gasto porque sino se les dispara el presupuesto del viaje. Pero sobretodo destacan por las ganas de hablar. Los humanos seguimos siendo seres sociales aunque nos aislemos con caminos o con muros.  

 

 

Seguidores